En la senda del Camino De Santiago entre Burgos y La Rioja y próximo a los yacimientos de Atapuerca, se encuentra este cautivador hotel rodeado de naturaleza, cultura y villas medievales. 
El antiguo edificio, singular y llamativo, ha sido restaurado con mimo y convertido en un pequeño hotel con encanto de 8 habitaciones. Pequeño y encantador hotel rural con jardín y chimenea en algunas de nuestras habitaciones.

Restaurado con mimo e inspiración viajera y rodeado de enclaves Patrimonio de la Humanidad, es el lugar perfecto para disfrutar de un sensual y relajado descanso en un entorno privilegiado.

Su original  mirador, de aire veneciano, fue el hilo conductor de una rehabilitación inspirada en los más evocadores lugares de la ruta de las especias, los viajes de Marco Polo o las últimas exploraciones africanas.

Respetando la estructura de piedra y madera, su decoración se recrea en torno a los cálidos colores azafrán, jengibre, vainilla y canela. Paredes cubiertas con papeles pintados a mano, pan de oro o primitivas telas junto con elementos más vanguardistas completan el conjunto decorativo. En definitiva una mezcla sutil de texturas, tonos y atmósferas que evocan aquellas expediciones, hoy ya imposibles.

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